Los encargados de las funerarias han dado a conocer que, por el aumento de fallecimientos causados por el coronavirus, ya no hay ataúdes, los pocos que hay ahora están sobrevalorados.
Los guatemaltecos no solo tienen que lidiar con los medicamentos de sus familiares, con el dolor que representa perder a un ser querido sino ahora con los elevados precios de los ataúdes.
“A nosotros nos está costando conseguir los ataúdes, por el incremento de fallecidos. Además, elaborar nuevos cuesta pues la madera está mojada y cuesta más trabajarla. Ya cuando retiramos el cuerpo, tenemos que sanitizar el ataúd y el cuerpo, esto incrementa el precio del servicio. Aparte de eso el uso de guantes y trajes de protección. A muchas personas les parece caro; sin embargo, nosotros tenemos que mantener el precio”, afirmó el trabajador de una funeraria.
Agregó que muchas personas creen que el cadáver ya no contagia el virus y insisten en velarlos.
“Es complicado, muchos creen que el cadáver ya no contamina; sin embargo, la carga viral que lleva el ataud es sumamente grande, nosotros se lo hacemos ver a las personas, la mayoría comprende, pero otros insisten y nosotros tenemos que ceder pero les advertimos que es bajo su cuenta y riesgo.
El precio de los ataúdes varía entre 900 a 10 mil quetzales.