La niña de 12 años, fue asesinada por el tío, que quemó su cadáver para esconder lo que realmente pasó. Su cuerpo fue abandonado en un camino de terracería; sin embargo, a criterio del juez, no había suficientes elementos para poder culpar al victimario.
Este 4 de febrero se cumple un año del crimen de la menor Chelsiry Paola Hernández Escalante. Ella desapareció el 4 de febrero del 2020, y fue localizada sin vida un día después en un camino de terracería en la aldea Chichimecas, Villa Canales, a 50 kilómetros del lugar de su desaparición.Sin embargo, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) pudo identificarla hasta días después debido al estado en el que fue encontrado el cuerpo.
El director del Inacif, Fanuel García, indicó que el cuerpo “estaba totalmente carbonizado, estuvo expuesto a fuego directo y durante un tiempo suficiente” y esto complicó las tareas de identificación. Por ello, las autoridades no saben si la menor fue ultrajada y luego asfixiada. El asesino, Édgar Leonel Marroquín Barrera, tío de la niña, afirmó frente a los medios de comunicación que él “supuestamente la habría atropellado con su auto, por lo que decidió llevarla a un terreno baldío y prenderle fuego al cuerpecito.
“Por accidente la atropellé y por miedo a ser asesinado metí el cuerpo de la niña en el baúl de un automóvil, pero ya había fallecido. Luego la fui tirar y quemar a Villa Canales”, afirmó al momento que se entregó a las autoridades. NO EXISTE JUSTICIAA un año de su muerte, los padres solo le piden al juez, que “se ponga en nuestro lugar” y que haga justicia.
“Yo como madre, pido justicia, porque hoy la vida no tiene importancia, en cualquier momento le pueden quitar a uno la vida”, afirmó la progenitora. Mientras que el padre le pidió al juez que se pusiera en “sus zapatos”.“Como no es él que perdió a un ser querido, le vale un comino lo que pasó con nosotros. Como dice el dicho, la ley es ciega, pero no es así, los ciegos somos los seres humanos, que no nos ponemos la mano en la conciencia.
Yo invito al juez a que se panga en nuestro lugar y que haga justicia”, aseveró. La fiscalía afirmó que el juez se extralimitó en su resolución, y no le dio el valor probatorio a los recursos que se presentaron, pues el hombre hasta confesó el crimen frente a los medios de comunicación.“Lamentablemente, así es como tristemente funcional el sistema de justicia en nuestro país. Debería hacerse justicia en memoria de cada niño violentado en el país, aunque no los volvamos a ver”, dijo el fiscal.