La OMS afirma que el brote de viruela del mono en más de 70 países es una situación “extraordinaria” y que ahora se clasifica como emergencia mundial.
La Organización Mundial de la Salud activó el sábado su máximo nivel de alerta para tratar de contener el brote de viruela del mono, que ha afectado a casi 17 mil personas en 74 países, anunció su director general.
“He decidido declarar una emergencia de salud pública de alcance internacional”, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus en una rueda de prensa, afirmando que el riesgo en el mundo es relativamente moderado, salvo en Europa, donde es alto.
En una primera reunión, el pasado 23 de junio, la mayoría de expertos recomendó a Tedros no decretar la emergencia de salud pública de alcance internacional.
“La viruela del mono está fuera de control, no hay ninguna razón legal, científica o sanitaria para no declarar una emergencia de salud pública de magnitud internacional”, dijo en Twitter el viernes Lawrence Gostin, experto estadounidense en derecho de la salud pública y director del Centro de Derecho de la Salud de la OMS.
Desde inicios de mayo se detectó un aumento inusual de los casos fuera de los países de África central y occidental donde el virus es endémico, extendiéndose por el mundo entero, con un fuerte número de contagios en Europa.
La viruela del mono –que fue detectada por primera vez en el ser humano en 1970– es menos peligrosa y contagiosa que su prima la viruela, erradicada en 1980.
En la mayoría de los casos, los enfermos son hombres, relativamente jóvenes, que tienen relaciones homosexuales y viven por lo general en ciudades, indicó la OMS.
Según un estudio del New England Journal of Medicine realizado sobre 528 personas en 16 países –el más amplio hasta la fecha– el 95% de los casos se contagiaron por vía sexual.