La posibilidad de suspender la aplicación de videos cortos ya había surgido anteriormente durante el gobierno de Donald Trump.
El avistamiento y posterior derribo de un globo de origen chino que sobrevolaba el cielo estadounidense, y que según Washington cumplía funciones de espionaje, ha vuelto a poner en el foco a TikTok, también china y una de las aplicaciones móviles de mayor uso a nivel mundial.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha sido preguntado este lunes sobre una posible prohibición de la red social en EE UU. “¿Suspender TikTok? No estoy seguro. Lo que sé es que no tengo instalada la aplicación en mi teléfono móvil”, ha respondido a su llegada a la Casa Blanca, tras pasar el fin de semana en la residencia de Camp David.
El hecho de que Biden no tenga TikTok no responde a una falta de interés por parte del mandatario, sino a una cuestión de seguridad nacional. Tal y como ha recordado hoy la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, su instalación no está permitida en los dispositivos del personal gubernamental.
“La administración Biden nunca ha permitido tener TikTok en los dispositivos de la Casa Blanca. Otras agencias federales tienen las mismas restricciones. Hemos sido claros acerca de nuestras preocupaciones acerca de aplicaciones como TikTok”, ha dicho, aunque ha declinado responder a la pregunta de si la aplicación es un riesgo para la seguridad de EE UU.
En los últimos días, algunos estados están siguiendo esa misma política, prohibiendo la instalación de TikTok en dispositivos oficiales. De hecho, este mismo lunes el gobernador de Texas, Greg Abbot, ha anunciado un plan para prohibir su uso en los dispositivos de todas las agencias del estado a partir del 15 de febrero.
“Los riesgos de seguridad asociados con el uso de TikTok en dispositivos utilizados para llevar a cabo importantes negocios en nuestro estado no deben ser subestimados ni ignorados”, ha dicho Abbott. “TikTok es propiedad de una empresa china que emplea a miembros del Partido Comunista chino. Recolecta cantidades significativas de datos del dispositivo del usuario, incluyendo su actividad en internet al detalle. Es crítico que las agencias gubernamentales y sus empleados estén protegidos de las vulnerabilidades presentadas por el uso de esta aplicación”, ha añadido.
La amenaza de cierre de TikTok en EE. UU. no es nueva. El anterior presidente, Donald Trump, llegó a firmar una orden ejecutiva para su suspensión, como también la de WeChat, también de origen chino. Trump sí llegó a considerarla un “peligro para la seguridad nacional”, pero la orden fue revocada por la administración Biden por los problemas legales que desencadenaría.