Los vientos y lluvias que azotaron una ciudad turca se han llevado los campamentos de los damnificados tras los terremotos que ocurrieron el pasado febrero y que le quitaron la vida a miles de personas.
Los fuertes vientos e intensas lluvias que azotaron la ciudad turca de Kahramanmarash, en el sur del país, derribaron un campamento temporal habitado por damnificados de los terremotos de principios de febrero, dejando un muerto y decenas de heridos, informó el ministro de Salud, Fahrettin Koca.
De acuerdo a los reportes, los vientos huracanados arrasaron las tiendas de campaña y destrozaron varios de los refugios temporales, lanzando pedazos de los techos de los edificios afectados por los aires.
Según dio a conocer el funcionario, el temporal dejó 50 personas heridas, ninguna de ellas con lesiones de gravedad.
El terremoto de magnitud 7,8 que sacudió Turquía el pasado 6 de febrero ha sido uno de los más devastadores de la historia del país, y causó la muerte de más de 45.000 personas y millones de dólares en daños materiales.
