El siniestro, que ha estado activo desde el martes, ya ha consumido más de seis mil hectáreas.
El incendio forestal que se declaró el martes en la isla española de Tenerife se ha extendido hacia el norte debido a las condiciones meteorológicas, obligando a efectuar nuevas evacuaciones en los municipios de La Orotava, La Matanza, La Victoria, El Sauzal, Santa Úrsula y Los Realejos, informaron las autoridades locales.
Según cálculos provisionales obtenidos del censo, más de 26.000 personas han tenido que ser confinadas o evacuadas en once municipios afectados por el fuego, que arrasa ya más de 6.700 hectáreas.
Debido al humo generado por las llamas, la calidad de aire ha sido desfavorable en 19 municipios, por lo que se recomienda mantener puertas y ventanas cerradas, evitar salir al exterior, o en su efecto, emplear el uso de tapabocas FFP2.
En las labores de extinción participan 265 efectivos por tierra y otros 19 medios aéreos, con la incorporación del helicóptero Kamov, con capacidad para 4.500 litros de agua, no obstante, la meteorología y el humo impiden actuar en varias zonas sin riesgo.
El director técnico de las labores de extinción, Pedro Martínez, declaró que el incendio “está fuera de capacidad de extinción”, lo que, según la meteoróloga Vicky Palma, quiere decir que prácticamente el “fuego no da tregua y es imposible atacarlo”, por muchos medios de extinción que se involucren. “No hay ventana de actuación, no se puede hacer prácticamente nada. Las condiciones meteorológicas, el hambre del fuego lo hace imposible”, apuntó.