Aunque las latas de atún son ricas y nutritivas, su consumo regular puede causar estos problemas.
Las latas de atún son uno de los alimentos que, para muchos en el mundo, no puede faltar al momento de hacer las compras. Esto gracias a la facilidad que tiene este alimento para ser utilizado dentro de diferentes recetas.
El atún es un pescado que se caracteriza por tener altos niveles de Omega 3 y proteína, por lo que resulta común escuchar que se encuentra incluido en la dieta de distintos individuos. Sin embargo, consumirlo de manera diaria podría resultar contraproducente en la salud.
Erika Maestro, dietista y nutricionista, asegura que lo mejor siempre es evitar consumir comidas enlatadas, pues esto debería suceder “en un proceso de escasez de alimentos, cosa que no pasa hoy en día”. Además, la experta asegura que el problema principal es el mercurio.
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), las mujeres embarazadas o en lactancia y los niños entre 0 y 10 años deben evitar el consumo excesivo de alimentos con altos niveles en ese elemento químico. Es por esto que este grupo de personas debe reducir la presencia de algunos peces como el espada, el tiburón y el lucio en su dieta diaria.
Por otro lado, la Aesan asegura que la población en general puede comer pescado entre tres y cuatro porciones a la semana, pero en caso de ser un producto enlatado como el atún, se permiten máximo dos latas en un periodo de siete días.
La acumulación de mercurio en el organismo presenta un alto riesgo de sufrir una intoxicación con diferentes consecuencias, como problemas en la piel, en las mucosas o el intestino, dolores de cabeza fuertes e incluso alteraciones en el sistema inmunológico, según explica la dietista Maestro.
“Tengo pacientes que en este momento no se sienten mal, pero esto es acumulativo y llega un momento que por un virus o por otra toxiinfección, se produce una alteración en la barrera intestinal, generando esta toxicidad”, explica la experta. Además, asegura que estos tóxicos se acumulan en las células grasas del cuerpo y es por esto que las afecciones se presentan sobre todo en “personas que hacen dietas de adelgazamiento”.
Aunque la elección de latas de atún se realice sobre todo por la practicidad que ofrece para ser consumida e integrada en cientos de recetas, es importante tener en cuenta que lo mejor sería comprar algunos tipos de atún que no estén enlatados para así evitar la acumulación de mercurio en el organismo.
De la misma manera, puede ser reemplazado por otros tipos de pescado que se puedan consumir más frescos y así se prioriza el bienestar del cuerpo. Si usted no desea retirar el atún enlatado de su plan alimenticio, es importante que limite su presencia en la semana.