Este domingo decenas de ballenas fueron encontradas muertas en una isla escocesa, desgraciadamente la guardia costera se vio en la obligación de dormir a las pocas ballenas que sobrevivieron al no poder devolverlas al mar.
Más de 50 calderones, conocidos también como ballenas piloto (‘Globicephala’), murieron este domingo a causa de un varamiento masivo en una playa de las islas Hébridas Exteriores, pertenecientes a la isla escocesa de Lewis y Harris, informó la organización benéfica British Divers Marine Life Rescue (BDMLR).
Solo 15 de los, aproximadamente, 55 calderones varados, tanto adultos como crías, seguían vivos cuando llegaron los equipos de rescate. Con los intentos por devolver al mar a algunos de los delfines más activos, se pudo salvar solo a uno, según un comunicado de la organización.
Como no pudieron regresar a los animales restantes al agua dadas las condiciones de poca profundidad, el veterinario local, la Guardia Costera, el servicio Bomberos y Rescate, así como también un veterinario forense, tomaron la decisión de sacrificarlos por motivos de “bienestar”.
