La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido ha ampliado la lista oficial de síntomas de Covid-19 para incluir otros 9 signos de infección, como dolor de garganta, dolores musculares y diarrea.
La actualización de la información se produce más de 2 años después del inicio de la pandemia e incluye otros síntomas nuevos, como dificultad para respirar, cansancio, dolor de cabeza, secreción nasal, falta de apetito y malestar.
Las autoridades señalan que “los síntomas del Covid-19 y de otras infecciones respiratorias”, como la gripe y el resfriado, son muy similares.
Sin embargo, mientras que los principales síntomas de las cepas anteriores reconocidos hasta ahora en el Reino Unido han sido la fiebre, la pérdida de olfato y el goteo nasal, el nuevo síntoma más reportado es el dolor de garganta.
Para el epidemiólogo británico Tim Spector, creador de una aplicación informática que recoge información de los infectados, se trata de una actualización que debería haberse producido antes.
“Es una pena que se hayan equivocado de orden, pero es un comienzo y podría ayudar a reducir las infecciones”, comentó en la red social Twitter.
“Parece que estamos en el inicio de la siguiente oleada y esta vez ha afectado a las personas mayores un poco antes que la última oleada. Mucha gente sigue utilizando las directrices del gobierno sobre los síntomas, que son erróneas”, dijo Spector.
“Por el momento, el Covid comienza en dos tercios de las personas con un dolor de garganta. La fiebre y la pérdida de olfato son realmente raras ahora, por lo que muchas personas mayores pueden no pensar que tienen Covid. Dirían que es un resfriado y no se harían la prueba”, agregó.
La noticia llega en un momento en el que el Reino Unido está registrando un número récord de casos y también el fin de las pruebas rápidas proporcionadas por el gobierno.
Un estudio de la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS) calcula que la semana pasada se infectaron 4,9 millones de personas, lo que supone un descenso respecto a los 4,3 millones de la primera semana del año, que fue el récord anterior en el país, con 67 millones de personas.
La actual oleada se atribuye a la subvariante Omicron BA.2, que se ha vuelto dominante en las últimas semanas tras el levantamiento de las restricciones en Inglaterra, incluyendo el uso obligatorio de mascarillas, el aislamiento profiláctico para los infectados y las pruebas para los viajeros internacionales.