Al tratar de bloquear una campaña de anuncios, un juez de Florida dejo en claro que no pueden prohibir ese tipo de publicidad, “El gobierno no puede excusar su censura”.
El juez de distrito Mark E. Walker del Distrito Norte de Florida buscó hacer sencilla la lectura del fallo que emitió con una frase: “Para simplificarle las cosas al estado de Florida: Es la Primera Enmienda, estúpido”.
El juez federal emitió un fallo este jueves para ponerse del lado de las estaciones de televisión locales en una disputa sobre un anuncio de televisión a favor del derecho al aborto, una campaña televisiva y en las calles que llama a votar Sí a la Enmienda 4 para restaurar derechos reproductivos.
El juez emitió una restricción temporal contra el director de salud de Florida después de que el Departamento de Salud de Florida amenazara con presentar cargos penales contra las emisoras que transmitieran el anuncio.
Tras la decisión, el Departamento de Salud estatal no puede bloquear la campaña de televisión en apoyo de una medida electoral que protegería el derecho al aborto.
“El gobierno no puede excusar su censura indirecta del discurso político simplemente declarando que el discurso desfavorecido es ‘falso… Para que sea sencillo para el Estado de Florida: es la Primera Enmienda, estúpido”, escribió el juez.
La controversia surge de un anuncio de campaña del grupo “Floridians Protecting Freedom”, que está detrás de la campaña “Yes on 4”, que promueve una medida electoral que busca revocar la prohibición del aborto a las seis semanas de Florida consagrando el derecho al aborto en la Constitución estatal.
“¿Ha oído hablar de la enmienda 4?”, consulta la campaña del grupo a favor de los derechos reproductivos en sus esfuerzos para movilizar a los votantes ante un importante referéndum sobre las restricciones al aborto en su estado, convocado para el mismo día que las presidenciales estadounidenses de noviembre.
Con esta consulta, los electores tendrán la posibilidad de restablecer el pleno acceso al aborto para millones de mujeres hasta la viabilidad fetal (en torno a las 22 semanas de embarazo) en Florida, sureste de Estados Unidos.
Desde mayo, salvo excepciones, impulsado por la mayoría conservadora de Florida y firmado por el gobernador republicano Ron DeSantis, ya no es posible abortar en el estado más allá de las seis semanas de embarazo, esto es, antes de que muchas mujeres sepan que están embarazadas.
Para ser adoptada, la Enmienda 4 deberá obtener un 60% de “sí”, el umbral más alto de los 10 estados que celebrarán referendos sobre el aborto el 5 de noviembre. Así que los activistas proaborto trabajan sin descanso para convencer a la gente de votar a favor del texto.
John Wilson, el asesor general del Departamento de Salud, envió las cartas a varias estaciones de televisión que transmitían el anuncio, a lo que la organización “Floridians Protecting Freedom” respondió con una demanda contra Wilson y el director general de servicios sanitarios del estado, Joseph Ladapo.
El grupo pro derechos reproductivos dice que las amenazas son una “coerción inconstitucional y discriminación por puntos de vista”. El juez estuvo de acuerdo en que las amenazas eran “discriminación”. La orden prohíbe al menos temporalmente intimidar a las estaciones locales por emitir el anuncio.
El Departamento de Salud dice que el anuncio sobre el derecho al aborto es “inequívocamente falso”.
En el anuncio muestra a una sobreviviente de cáncer cerebral que dice que la ley estatal le habría impedido recibir un aborto que le salvaría la vida. “Los médicos sabían que, si no interrumpía mi embarazo, perdería a mi bebé, perdería mi vida… Florida ahora ha prohibido los abortos, incluso en casos como el mío”.
Si es adoptada, la enmienda entrará en vigor en enero de 2025.