El adolescente habría admitido que se sentía alejado de sus amigos y familiares, por lo que la policía decidió brindarle ayuda al ver que el joven tenía un “problema de salud mental”.
El Departamento de Uvalde, Texas, fue informado por el jefe del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde, Pete Arredondo, que un adolescente de 17 años envió mensajes amenazantes a través de Snapchat a cinco estudiantes de la Escuela Secundaria de Uvalde.
De acuerdo con la policía, los mensajes decían que iba a “acabarlos” al tiempo que posaba con lo que parecía ser una pistola.
El jefe de la UPD, Daniel Rodríguez, informó que el departamento escolar, una identidad separada del Departamento de Policía de Uvalde, tiene jurisdicción en los terrenos escolares, pero la UD se hizo cargo del caso porque las amenazas se hicieron fuera del horario escolar y fuera de los terrenos escolares.
Tras la amenaza del adolescente, la policía se dirigió hasta él y descubrieron que el arma con la que posó resultó ser una pistola Glock Airsoft que dispara perdigones de plástico y que no era de su propiedad, sino de un amigo. Ese amigo también fue investigado y la madre del estudiante permitió que la policía registrara su casa.
Según Arredondo, el joven de 17 años puede estar sufriendo problemas de salud mental y ahora está recibiendo asesoramiento de la escuela después de admitir que hizo una amenaza: “No sólo se le hará responsable por lo que hizo, sino que también estamos tratando de ayudarlo”.
En tanto Daniel Rodríguez invitó a todo aquel que haga una amenaza a denunciar: “Si ves algo, di algo. Saltaremos sobre él”. Y agregó que el joven lanzó la amenaza porque se sentía alejado de sus amigos y familiares, por lo que intentó llamar atención la de una mala manera.
Por ahora el adolescente está acusado de crear una falsa alarma o reportar una emergencia y enfrenta una posible condena de dos años tras las rejas y una multa de hasta $10,000.