El depuesto mandatario aseguró que de no haber una intervención por parte de la comunidad internacional habría “consecuencias devastadoras para el país” o incluso la región.
El presidente destituido de Níger, Mohamed Bazoum, instó a EE.UU. y a la comunidad internacional a que ayuden a restablecer el orden constitucional en el país, advirtiendo que el éxito del golpe de Estado tendría consecuencias “devastadoras” no solo para la nación africana, sino para la región y el mundo.
“Este golpe, lanzado contra mi Gobierno por una facción militar el 26 de julio, no tiene justificación alguna. Si tiene éxito, tendrá consecuencias devastadoras para nuestro país, nuestra región y el mundo entero”, escribió Bazoum en un artículo publicado.
El depuesto líder, que dice ser un “rehén”, calificó el derrocamiento como un “cínico esfuerzo por socavar el notable progreso que Níger ha logrado bajo la democracia”. Además, hizo un llamado a luchar por los “valores compartidos, incluido el pluralismo democrático y el respeto por el Estado de derecho, que son la única forma de lograr un progreso sostenible contra la pobreza y el terrorismo”.
Según Bazoum, durante su mandato la seguridad en la nación “mejoró dramáticamente” gracias a las alianzas con EE.UU. y Europa. “La ayuda exterior representa el 40% de nuestro presupuesto nacional, pero no se entregará si el golpe tiene éxito”, dijo, señalando que ahora la contribución está bloqueada por las sanciones de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO).
Asimismo, afirmó que bajo su Administración el país logró un gran progreso en la “gobernanza económica y social”, al recordar que, anteriormente, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, calificó a Niamey como “un modelo de resiliencia, un modelo de democracia, un modelo de cooperación”.
“Níger se erige como el último bastión del respeto por los derechos humanos en medio de los movimientos autoritarios que se han apoderado de algunos de nuestros vecinos”, denunció el depuesto presidente y uno de los pocos líderes prooccidentales en África. Además, criticó a Malí y Burkina Faso, que según aseguró, cuentan con Gobiernos “instalados por tomas militares”.
Por su parte, la junta militar de Níger y miembros de la sociedad civil hicieron este jueves un llamado a la movilización en Niamey, para protestar contra la intervención extranjera y luchar por la libertad del país.