Una mujer de Texas fue sentenciada a cadena perpetua tras declararse culpable de asesinato capital por la muerte de su hija de 7 años, a quien dejó sola en casa de sus hermanos para irse de fiesta en 2020.
Lauren Kay Dean, de 28 años, reconoció su culpabilidad el pasado miércoles y tuvo una sentencia adicional de 20 años por dos cargos de abandono y poner en peligro a un niño tras el fallecimiento de Jordynn Barrera.
La denuncia penal destacó que Dean dejó sola a sus tres hijos, incluida Barrera, estaba postrada en cama por sus problemas médicos, pues se le diagnosticó síndrome de Down y parálisis cerebral.
Tras esto, la policía de Bay City, ubicada a unas 80 millas al suroeste de Houston, respondió al incidente para realizar un control de bienestar en el apartamento de la mujer el 31 de enero de 2020.
Dean regresó a su casa e invitó a las autoridades a entrar para demostrar que sus hijos estaban sin peligro alguno. No obstante, al ingresar, los oficiales vieron a la menor fallecida.
La mujer fue inmediatamente arrestada, y enfrentó en principio tres cargos separados de delitos graves de abandono y peligro de un niño, colocándolos en peligro inminente de lesiones corporales en segundo grado. Pero luego, la mujer fue acusada de asesinato capital de una persona menor de 10 años, según la denuncia.
Los otros dos hijos, de 5 y 3 meses, también vivían en la residencia, siendo retirados inmediatamente de la casa.
Según la información, la hija de Dean no se podía comunicar a raíz de su condición, por lo que requería una sonda de alimentación y una atención contínua las 24 horas.
De acuerdo con los fiscales, la niña murió porque su madre salió de su casa para ir de fiesta a un bar cercano. Dean se declaró culpable para evitar el juicio y la posibilidad de pena de muerte, según el Bay City Tribune.