La contagiosa variante ómicron sigue extendiéndose en Estados Unidos y el mundo, con un dramático aumento de casos y ocupación de muchos sistemas hospitalarios, por lo que la recomendación de profesionales es el uso de mascarillas de mayor calidad.
En una reciente audiencia del Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones del Senado en Estados Unidos, altos funcionarios de salud pública lucieron diferentes tipos de máscaras. La doctora Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), tenía una máscara quirúrgica debajo de una máscara de tela, mientras que el doctor Anthony Fauci, asesor médico jefe del presidente, usaba un respirador N95.
Algunos gobiernos locales en y organizaciones tienen sus propias normas. El condado de Los Ángeles, por ejemplo, requerirá a partir del 17 de enero que los empleadores proporcionen máscaras N95 o KN95 a los empleados.