Por su condición y razones migratorias, los haitianos tienen muchas dificultades para obtener refugio en un México que suma un récord de peticiones en lo que va de año, explicó este jueves el titular de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Andrés Alfonso Ramírez.
México ha recibido 77 mil 559 peticiones de asilo entre enero y agosto, un número que ya supera el anterior máximo de 70 mil 423 solicitudes de todo 2019.
Sobresalen las solicitudes de hondureños, 29 mil 699, y de haitianos, con 18 mil 883 casos.
Los haitianos han reflejado en las últimas semanas la enorme crisis migratoria que padece el país porque miles de ellos están varados en la ciudad de Tapachula, fronteriza con Guatemala, y también en el norte del país, donde viven en condiciones precarias tras intentar cruzar masivamente desde Ciudad Acuña, en Coahuila, a Del Río (Texas, EE.UU.), siendo en su gran mayoría deportados.
No obstante, por su situación migratoria y su paso por otros países como Brasil y Chile, la mayoría no son aptos para ser refugiados.
“Los haitianos en realidad no son refugiados desde nuestro punto de vista (porque) no vienen bajo ninguno de los elementos propios de la definición de refugiado”, explicó el coordinador general de la Comar, con una larga trayectoria en la materia con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Ramírez explicó que la mayoría de haitianos hoy en México proceden de Brasil y Chile y salieron de su país tras el terremoto de 2010 para comenzar a llegar a México a partir de 2019.
Añadió que no cumplen “con las características propias” del refugiado -como huir de la violencia o tener el temor fundado de ser perseguido por motivos de índole política o de raza, por ejemplo- pues en su mayoría vienen “básicamente por razones económicas”.