El Reino Unido está conmocionado por la agresión que Kelvin Pogo, de 27 años, recibió por parte de su novia Esther Afrifa, de 28 años, quien le arrojó ácido del diablo en el rostro en un arranque de celos mal infundados.
Según se ha dado a conocer, los hechos ocurrieron al interior de un apartamento ubicado al norte de Londres la madrugada del 22 de diciembre de 2019, pero ha sido ahora que las autoridades de dicho país han dejado caer todo el peso de la ley sobre la agresora.
Esther Afrifa pasará 14 años de prisión mientras que Pogo se enfrenta a un sinfín de problemas psicológicos provocados por las quemaduras que su expareja le causó después de que le rociara una gran cantidad de ácido en el rostro, así como en el cuerpo por creer que la estaba engañando con otra mujer, lo que resultó falso.
El oriundo de África contó al mismo diario que aquel fatídico día sintió una fuerte quemazón en el pecho que lo despertó vertiginosamente, pensando que una tercera persona le quería hacer daño, le pidió a su novia que llamara al 999 para pedir ayuda, Esther Afrifa hizo una falsa llamada y en lo que esperaban le ofreció un vaso con agua que con tenía el mismo ácido que consiguió a través de la web.
Pogo tomó un trago, pero sintió que le quemaba, Afrifa le pidió que bebiera sin temor y que tenía esa sensación porque era agua del grifo; gracias a que en el país natal del agresor beber agua no potable puede traer graves consecuencias dejó de beberla y así evito que sufriera quemaduras internas.
Minutos después, Esther Afrifa le arrojó ácido en el rostro, provocando el desconcierto del estudiante de cine quien salió gritando del apartamento en busca de ayuda.
Una persona que iba pasando se percató del incidente y llevó hasta un hospital al joven malherido.
Han pasado casi dos años de aquella agresión, pero para Kelvin Pogo parece estar viviendo todos los días la agresión de su expareja; según contó al diario antes mencionado de manera recurrente tiene pensamientos suicidas, además, cuando alguien toca a la puerta cree que va a sufrir otro ataque con ácido.
Sus sueños de ser cineasta se han detenido por la falta de seguridad, por ahora se encuentra en tratamientos médicos y se ha sometido a varias cirugías en busca de que su rostro luzca mejor.