El huracán Mocha, que azoto la región el pasado domingo ha dejado más de 100 muertos y miles de personas evacuadas.
La cifra oficial de fallecidos por el potente ciclón que azotó Myanmar subió a al menos 145 personas, incluyendo 117 miembros de la minoría musulmana rohinya, reportó la televisora estatal el viernes.
La cifra corresponde al estado occidental de Rakhine, donde Mocha causó la mayoría de los daños, pero la cadena no precisó cuántos decesos relacionados con la tormenta hubo en el resto del país.
El conteo de las víctimas ha sido lento en parte por los problemas de comunicación en las zonas afectadas y por el férreo control de la información por parte del gobierno militar. La junta indicó que los datos no oficiales que apuntan que habría más de 400 víctimas mortales son falsos, pero ante la falta de una confirmación independiente, las dudas acerca del alcance real de la destrucción persisten.
Mocha tocó tierra cerca del municipio de Sittwe, en el estado de Rakhine, el domingo por la tarde con vientos de hasta 209 kilómetros por hora antes de debilitarse tierra adentro. El meteoro, el más destructivo en el país en al menos una década, causó amplias inundaciones repentinas y cortes de electricidad, mientras que sus fuertes vientos arrancaron tejados y derribaron torres de telefonía móvil.
“Millones de personas viven en la trayectoria del ciclón y se está realizando un enorme esfuerzo para retirar los escombros y ofrecer alojamiento a aquellos cuyas casas quedaron dañadas o destruidas”, dijo la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios el jueves. “La costa de Rakhine fue la más afectada por el ciclón, aunque también se reportaron impactos graves en el noroeste y algunos daños en el estado de Kachin”.
En el reporte del viernes, se dijo que cuatro soldados y 24 residentes en Rakhine, además de 117 rohinya, fallecieron y culpó de las muertes a la negativa de la población a marcharse de la zona pese a las advertencias de las autoridades antes de la llegada de Mocha.
Las autoridades evacuaron a 63.302 de los 125.789 rohinya refugiados en 17 campamentos ubicados en 17 municipios, entre ellos Sittwe, desde el viernes. Se identificó a los rohinya como “bengalíes”, el nombre con el que las autoridades suelen referirse a la minoría para sugerir que emigraron a Myanmar de forma ilegal.