Una madre presenció como su hijo moría a causa de una bala que iba dirigida a otra adolescente.
Una niña de 14 años fue acusada de homicidio en Texas después del tiroteo que dejó a un niño de 11 años muerto que fue alcanzado por una bala perdida, de acuerdo con la policía de Dallas.
Las autoridades recibieron un informe de una balacera en un complejo de apartamentos al sur de Dallas el domingo a las 2:00 de la tarde como parte de sus averiguaciones, los funcionarios determinaron que hubo una pelea entre dos menores en el estacionamiento del lugar.
“Un sospechoso juvenil recuperó una pistola y disparó en dirección a la mujer con la que estaba peleando; sin embargo, el disparo alcanzó a un transeúnte juvenil masculino”, declaró la policía en un comunicado.
El infante de 11 años fue trasladado a un centro asistencial donde murió a casa de sus heridas, informaron los oficiales.
La sospechosa en cuestión al principio se fugó de la escena, pero después fue capturada y acusada. Permanece recluida en el Centro de Justicia Juvenil Henry Wade, expresó la policía. Se recuperó un arma en las pesquisas.
Los agentes no han revelado los nombres de los involucrados en el crimen debido a sus cortas edades.
Por su parte, Vashunte Settles identificó a la víctima mortal como su hijo De’Evab McFall y dijo que había muerto frente a ella.
“Tener que presenciarlo y estar allí… Nunca lo superaré”, le dijo al medio de comunicación.
La madre dijo que su hija estaba teniendo un altercado con una niña de 14 años que de repente sacó un arma y disparó, fallando en darle a la menor, pero alcanzando a De’Evan.
“Era tan inocente. Definitivamente, no se lo merecía”, expresó Settles. “Solo deseo que la generación más joven se detenga y piense antes de hacer cosas irracionales, porque en esta situación, no soy la única que sufre”.