En el undécimo día del juicio entre los actores por los presuntos abusos y agresiones que ha sufrido Amber Heard por parte de Johnny Depp, le tocó el turno al equipo de seguridad del actor. Malcom Connolly, guardaespaldas personal del personaje de Jack Sparrow, intervino a través de una videoconferencia.
En esta declaración del integrante del equipo de seguridad del actor, Connolly contó todo lo que vivió a lo largo del matrimonio entre Johnny Depp y Amber Heard, aportando incluso material gráfico que respaldan sus palabras.
El agente dijo que Johnny Depp aseguró que el actor “no era feliz” en su matrimonio con Amber Heard. Además, Malcom Connolly declaró que Heard era amable al principio, pero conforme pasaba el tiempo, su actitud cambió completamente: “Amber empezó a cambiar. Se volvió luchadora, exigente… podía volverse fría en un abrir y cerrar de ojos”, explicó.
Connolly, como aparece en la declaración, emitió que la actriz “quería llevar los pantalones en la relación”, mostrándose “dominante”. Al contrario, Johnny Depp se mantenía “callado”. Sin embargo, el guardaespaldas nunca vio lesiones en Amber Heard, pero sí las vio en el intérprete.
Desde “rasguños hasta hinchazón”, dijo Connolly. El guardaespaldas mostró fotografías que reforzaron su versión. Fue en la luna de miel de los actores y se aprecian lesiones en el rostro de Johnny Depp.
“La mayoría de estas marcas estaban en el lado izquierdo de su rostro. Tenía el labio hinchado y moretones en su ojo. Ha chocado contra una puerta… o una puerta ha chocado contra él”, declaró Connolly, quien gracias a su trabajo sabe identificar cualquier lesión.
El guardaespaldas nunca presenció discusión alguna entre el matrimonio, pero sí gritos de ella. Una vez, según Connolly, vio caer una botella por el hueco de la escalera, por lo que optó por sacar de la escena a Depp. Por último, declaró haber visto al actor consumir drogas, pero no interfirió en su desempeño como actor: “Creo que Jack Sparrow es más borracho que Johnny Depp”.