Retumbos, un enorme río de lava y ceniza sobre los lugares aledaños, son parte del incremento de la actividad del volcán de Fuego que este viernes amaneció enojado.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), alertó que el volcán de Fuego presentó un incremento en su actividad y flujo de lava en dirección a la barranca ceniza.
El incremento se observa en la mayor cantidad de desgasificación e incandescencia en el cráter, además prevalecen de manera progresiva incremento en sonidos similares a una locomotora.
El ente científico añadió que este incremento ha permitido la formación de un flujo de lava de aproximada de 300 metros de longitud hacia la barranca ceniza, originando avalanchas moderadas a fuertes.
A esta actividad se suma las columnas de ceniza que se elevan varios metros desde el cráter lo que está provocando la caída de ceniza fina en diferentes comunidades en las faldas del volcán.
De momento las autoridades no descartan la posibilidad que la actividad volcánica incremente y genere flujos de lava en otras direcciones.