Vecinos de localidades aledañas reportan retumbos fuertes y fuertes explosiones. Autoridades aseguran que el volcán incrementó su actividad en horas de la noche, por lo que piden a los pobladores extremar precauciones.
Las columnas de ceniza llegan a los 5 mil metros de altura sobre el nivel del mar, una estadística alarmante, que recuerda la explosión del 2018 cuando la fuerte actividad soterró varias comunidades, con colunas 6 mil metros sobre el nivel del mar.
En el área se reportan constantes sonidos similares a los de una locomotora, de moderados a fuertes, retumbos constantes de carácter moderado en el perímetro volcánico, generando una onda de choque que causa vibración en viviendas de las comunidades cercanas al coloso ubicado en Chimaltenango, Sacatepéquez y Escuintla.
La erupción ha generado flujos de lava de un kilómetro de longitud informó el Instituto Nacional de Sismología Vulcanología Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
Mientras que el flujo piroclástico se desplaza en un diámetro de 6 kilómetros.
Según el Insivumeh, la erupción ha provocado caída de ceniza en Panimaché, Morelia, Santa Sofía, Sangre de Cristo, San Pedro Yepocapa, Palo Verde El Porvenir, La Rochela, Guadalupe, El Zapote.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) tiene especial vigilancia en las aldeas al sur del coloso porque los flujos de lava son de varios kilómetros de longitud.
Las autoridades recomiendan a la población no permanecer en las cercanías de las barrancas principales y a Aeronáutica Civil, tomar las precauciones con el tránsito aéreo debido a la altura de la columna de ceniza.