Además, brindó un discurso en el que resaltó la fuerza del pueblo para persistir por casi 20 días de protestas en contra de la corrupción. “Estamos en un momento de unidad en contra de la tiranía”, aseguró Arévalo.
“El pueblo de Guatemala no se rinde, las plazas y las calles están inundadas de protestas pacíficas, una expresión de determinación, de alegría, paz, y lucha del pueblo que nunca más vivirá bajo la corrupción”, afirmó el presidente electo.
Agregó que, en 1944, era una dictadura que sometía a todo un país y que, al día de hoy, es una tiranía de corruptos la que se enriquecen a costillas.
Desde tempranas horas decenas de personas se hicieron presentes al Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala para participar en esta fecha conmemorativa por el día de la revolución.