La presidenta en funciones del TSE aclaró que, su puesto de presidente del Tribunal Supremo Electoral ya finalizó y ahora únicamente es presidenta en funciones.
La presidenta en funciones del Tribunal Supremo Electoral, la magistrada Blanca Alfaro se pronunció este miércoles por los señalamientos que hicieron magistrados suplentes sobre su permanencia en la presidencia.
En sus declaraciones asegura que sí informó sobre la decisión de permanecer en la presidencia del TSE.
Asimismo, destacó que hubo convocatorias para desarrollar pleno con los magistrados suplentes el pasado 5 y 6 de enero, para abordar el tema.
La presidenta en funciones también indicó que reconoce que su presidencia inició el 26 de octubre de 2023 y finalizó el 5 de enero de este año, por lo que ya no es presidenta, sino presidenta en funciones, por la ausencia del magistrado titular Gabriel Aguilera, a quien le corresponde hasta el 20 de marzo de 2026.
Durante la conferencia, Alfaro estuvo acompañada por personal del TSE, y pidió la opinión del exmagistrado del TSE César Conde Rada y la exdiputada Nineth Montenegro, en torno al procedimiento que se debe seguir en estos casos.
Alfaro enfatizó que según lo establece la ley, la presidencia no se le puede entregar a magistrados suplentes, quienes tampoco tienen la facultad de convocar a un pleno, por lo que no puede, desde el punto de vista legal dejar un antecedente institucional de esa magnitud.
“En cuarenta años del TSE no se tiene un registro que magistrados suplentes hayan convocado a un pleno y yo dejo ese antecedente señores y señoras, y ciudadanos, cualquier pleno de suplentes podría desconocer en cualquier momento a los magistrados titulares. Imagínense lo que eso representaría para una institucionalidad que es ejemplo para las otras instituciones que también tienen alternanza y gobernanza, no estoy diciendo que es mi presidencia, mi presidencia terminó, qué me encantaría a mi poderla entregar al magistrado Gabriel Aguilera y pensar que el día de hoy serían 19 años de responsabilidad menos tantos días, pero aquí cada día acumulador 20 años más”, indicó la presidenta en funciones.
La magistrada señaló que los magistrados suplentes tienen su respeto y aprecio, pero también rechaza el comportamiento antiético, antimoral y vulnerable desde el punto de vista legal que han tenido en torno al tema, debido a que están llamados a guardar la paz del tribunal.
Sin embargo, los invitó a que como lo han anunciado procedan a las acciones legales de las que hablaron desde noviembre, cuando el magistrado suplente Marco Antonio Cornejo le preguntó cómo le iba a entregar la presidencia.
“Le dije lo mismo. Que procedieron al amparo ante la CSJ para buscar un mecanismo porque nadie puede aferrarse a un cargo que no le corresponde y mi cargo tuvo caducidad y ya terminó. Fue el magistrado Álvaro Cordón quien manifestó que tenía el mecanismo para hacer la alternanza sin ir a la Corte Suprema de Justicia y entregar históricamente la presidente a un suplente cuando la ley taxativamente reza que solamente los titulares podemos tener ese cargo tan hermoso y con tanta responsabilidad de la presidencia de este órgano maravilloso que es referente para la gobernanza de todo el país”, reiteró.
Asimismo, dijo que no se puede someter a denuncias penales que vengan posteriormente, por abandono del cargo y por hacer lo que no correspondía. “En cualquier momento si viene una resolución judicial, yo como dice la norma, como conocedora del derecho tengo que respetar cualquier resolución”, indicó.