El diputado, acusado de abuso autoridad, niega todas las acusaciones en su contra y asegura que “todo es un show”.
El partido Cabal dio un paso firme este jueves al iniciar el proceso de expulsión contra el diputado Julio Portillo, tras recibir denuncias de al menos cinco alcaldes que lo acusan de extorsión y coacción para obtener beneficios económicos.
El alcalde de La Unión, Edvin Gustavo Galván (“Tavito Galván”), denunció públicamente que Portillo exigía “el 20% de los proyectos de la Gran Cruzada por la Nutrición y el 10% de los fondos de consejos de desarrollo” en su municipio.

Galván presentó una denuncia penal contra el legislador, acusándolo de abuso de autoridad y presiones ilegítimas.
Otros cuatro alcaldes habrían reportado situaciones similares, según fuentes internas del partido.
El Comité Ejecutivo Nacional, convocado por el secretario general Edmond Mulet, decidió elevar el caso al Tribunal de Honor del partido para evaluar si Portillo violó los estatutos.

De comprobarse las faltas, el diputado por Zacapa podría ser expulsado de la organización que lo llevó al Congreso.
El legislador niega las acusaciones y las atribuye a una “persecución política”:
“Es por fiscalizar que me denuncian y hacen todo este show”, declaró.
Aseguró que no teme a los procesos y que seguirá ejerciendo su cargo “con partido o sin bancada”.
Cuestionó que el Tribunal de Honor “no está conformado”, aunque se mostró dispuesto a enfrentar las investigaciones.