Este fin de semana un automóvil cayó desde el séptimo piso del centro comercial Miraflores, como resultado, el joven de apenas 22 años falleció.
Familia y amigos de Oliver de Paz, quien fue la víctima mortal del accidente que se registró el fin de semana en un centro comercial, se reúnen en su funeral, para despedirlo y acompañarlo hasta su morada final.
Oliver de Paz hijo, el joven de 22 años que se encontraba en el kiosko en donde cayó un vehículo desde el séptimo piso, está recibiendo sus honras fúnebres en Amatitlán, en donde la comunidad, especialmente sus allegados y conocidos están consternados por lo ocurrido.
Al hablar de Oliver de Paz, las personas que lo conocían lo describen como un joven trabajador y estudioso, sus amigos; como un apoyo incondicional, que brindaba su ayuda a manos llenas.
Mientras que los más cercanos, su padre y hermano, como un pilar importante de la familia.
“Creo que Oliver, las pocas personas que dejaba entrar a su círculo social, fuimos afortunados. Daba su apoyo sin esperar nada a cambio, a mí en lo personal me ayudó a salir de situaciones fuertes. Es una de las mejores personas que ha tocado este mundo. Era un hermano para mí”, dijo Génesis, su mejor amiga.
Su hermano Kenneth, dijo que su hermano estuvo para él hasta su último momento y que incluso le guio, en cómo cuidar de su padre.
“Él era el único que estuvo para mí cuando fue lo de mi abuela, me dio el ejemplo de lo que tengo que hacer ahora con mi papá verdad”, expresó.
Kenneth indicó que para su familia este ha sido un año de grandes pérdidas y que ahora deben enfrentar otra.
Ya que en diciembre del año pasado murió su abuela, y de manera más reciente, apenas el 2 de febrero de este año, su madre.
En torno a la situación legal del joven conductor del vehículo, quien recientemente fue ligado a proceso, el hermano de Oliver indicó que exigen justicia para su hermano, pero que lo dejan en manos del creador, pues como creyentes saben que Él hará las cosas a su manera y que deben esperar.
Al mismo tiempo, agradece la solidaridad de las personas, tanto de quienes conocieron a su hermano, como de quienes no lo conocían. “Si lo hubieran conocido sabrían por qué hay mucha gente que está aquí con el corazón partido”, indicó.