Amazon dio fin a un programa en donde le pagaba a los empleados por publicar comentarios agradables sobre la compañía en sus redes sociales.
El programa, que duró tres años, tenía como fin contrarrestar las percepciones negativas sobre las condiciones de trabajo que hay en sus almacenes. Esto, debido a las quejas de trabajadores que decían que les pedían que trabajaran muy rápido y que esto provocaba lesiones.
A pesar del programa donde los empleados hacían buenos comentarios, los altos ejecutivos de Amazon decidieron terminar con él porque había sido ineficaz y, de hecho, había fracasado, lo que provocó más publicidad negativa.
El programa seleccionó cuidadosamente a trabajadores de la empresa para que publicaran en Twitter refutaciones a las declaraciones hechas por políticos, funcionarios de derechos laborales y cualquier otro crítico de la empresa.
Una publicación típica de estos trabajadores podría decir que ellos se sienten orgullosos de estar en Amazon o que la empresa los ha cuidado bien, o bien podrían refutar una crítica frecuente, como que a los empleados no se les da suficiente tiempo para ir al baño.
Estos empleados recibieron capacitación sobre cómo abordar las acusaciones con respuestas como: “No, eso no está bien. Trabajé en Amazon durante más de cuatro años y nunca vi a nadie orinar en una botella”, según se informó.
No está claro a cuántos trabajadores le pagó Amazon como parte de este programa, pero se calcula se reclutaron a 50 en 2019.
