A mi persona e imagino también a un montón de gente, le cuesta encontrar algo que realmente lo entretenga en la plataforma de Netflix, porque a pesar de que hay tanta oferta en el repertorio que ofrece, es difícil encontrar algo que después de verlo se quede uno con sabor agradable. Claro que lo hay, pero la mayoría son series que llevan 4 y 5 temporadas, lo cual es una exageración, porque las estiran hasta el extremo de caer mal. Hace unas dos noches ya estaba por darme por vencido de buscar y salirme del sitio, cuando me topé con una película del famoso director español Pedro Almodóvar, realizada en el año 1997, inspirada en una novela de la escritora inglesa Ruth Rendell, de título: Carne Trémula.
Carne Trémula, no es la gran cosa, pero tiene unos detallesque me atrajeron, como por ejemplo actúan todavía jovencitos, Javier Bardem, y en un papel cortísimo, la ahora su esposa Penélope Cruz. Ambos nominados este año como mejor actor y mejor actriz para los premios Oscar. Actúa también en cortísimo papel, la mamá de Javier Bardem, Pilar Bardem, que en España es considerada una estrella de todos los tiempos. Los demás protagonistas: Ángela Molina, Pepe Sancho, Francesca Neri y Liberto Rabal, componen una espiral de situaciones con una estructura dramática circular…el impactante comienzo del filme no es otro que el parto de una joven prostituta (Penélope Cruz), ayudada por su tutora y meretriz (Pilar Bardem) en un autobús. Todo esto ocurre en una siniestra noche del estado de excepción en España de 1970. Lo que cuenta Almodóvar es la vida de ese niño (Liberto Rabal), 20 años después. Como repito no es un peliculón de premios de academia, pero si entretiene, y tiene los elementos para hacerla interesante: Sangre, celos y sexo.
