La hija del cantante se dedica a la gastronomía y tenía un puesto de comida. Tras su accidente, ha compartido en redes sociales las secuelas del incidente, “Me quemé las pestañas y los párpados”.
Abigail Rivera, segunda de las cinco hijas de Lupillo Rivera, resultó con graves quemaduras en el rostro, ojos y manos tras sufrir un accidente con una estufa. Así lo han revelado sus redes y fuentes periodísticas en California.
Los hechos sucedieron el sábado pasado a bordo del Food Truck Casa Camarón y Sushi, que ella y su marido operan en la esquina de las calles Seventh y Magnolia Avenue, en Long Beach, CA.
La hija de Lupillo se aprestaba a encender la estufa del camión de comida cuando ocurrió el accidente. “Moví mi cara y apague la estufa tan pronto como vi la explosión”, afirmó. “El rostro de mi papá es lo último que vi”.
Rivera sufrió quemaduras de segundo grado en su rostro y ojos y sus manos y parte de su cabello también resultaron quemados. “Cuando vi el fuego lo apagué y me preguntaron ¿puedes respirar?”.
El incidente habría ocurrido porque al parecer Rivera no dejó sus implementos en el orden acostumbrado. “Me apresuré”, admitió.
En redes Abigail también ha documentado las secuelas que la explosión le dejó. “Estaba realmente asustada”, admitió en un estremecedor video que se ha hecho viral. “Me quemé las pestañas y los párpados. Sentí que mi cara estaba se estaba quemando”.
Abigail y su marido son los dueños de Casa Camarón y Sushi y según NBC el food truck fue inaugurado en abril pasado.
En redes, Abilagil, quien es madre de dos hijas, ha documentado sus retos y satisfacciones como dueña de un pequeño negocio.
Sin embargo, la hija de Lupillo asegura que es una veterana en la industria gastronómica y que labora en ella “desde los 16 años”.
Afortunadamente ella ha declarado en redes que va mejorando y que su papá le mandó unos sueros mexicanos para poder sanar su piel.
“Me desperté a las 3:00 AM esta mañana y no pude volver a dormirme. Lloré por todo lo que ha pasado, pero luego me levanté y me sentí agradecida. No tengo opción: debo ser fuerte por mi familia ellos me necesitan”, exclamó este martes en un post de Instagram. “A pesar de lo que sufrí y de lo que me estoy recuperando, debo seguir adelante. Y más importante Dios me salvó. Me rescató. Debo seguir en la lucha por mi propósito. ¡Gracias, Dios! Amén”.