Al jugador brasileño se le había prohibido usar el lago que estaba en su casa, algo que Neymar ha ignorado al hacer una fiesta en esta misma.
El municipio brasileño de Mangaratiba anunció este lunes que ha multado al futbolista Neymar por unas obras que ha hecho en su casa de playa en esa ciudad del estado de Río de Janeiro y que fueron suspendidas por las autoridades medioambientales.
La multa fue fijada en 16 millones de reales (3,3 millones de dólares o tres millones de euros) y se refiere a la construcción de un lago artificial en los amplios jardines de la residencia, en la que el jugador de la selección brasileña y el PSG francés descansa en estos días.
Hace dos semanas, la residencia fue visitada por las autoridades medioambientales, que descubrieron diversas irregularidades, embargaron las obras y prohibieron el uso del lago, una decisión que Neymar luego incumplió, según vídeos publicados en internet con imágenes de una fiesta que ofreció unos días después.
Las obras que se realizaban en la mansión de Neymar fueron suspendidas el jueves pasado cuando las autoridades ambientales encontraron una serie de irregularidades en las mismas.
Algunos de los puntos expuestos por los fiscales fueron el desvío del curso de riachuelos, la captación de agua de un río sin la debida autorización, excavaciones prohibidas, movimiento irregular de rocas y tierra, y utilización de la arena de la playa.
Las obras se realizaban en el condominio Aero Rural, contiguo al de Portobello, donde el jugador tiene otra lujosa mansión de 5.000 metros cuadrados valorada en 28 millones de reales (unos 5,87 millones de dólares o 5,36 millones de euros).