Novak Djokovic finalmente rompió su silencio desde su polémica en el Abierto de Australia en donde fue deportado por no tener ninguna dosis de la vacuna contra el COVID. Ahora, el tenista serbio volvió a reafirmar su intención de vacunarse sin importar que esta decisión le pueda costar su carrera y el pelear los títulos más grandes del año.
“No estoy en contra de la vacunación, pero mi cuerpo es más importante que cualquier título. Es el precio que estoy dispuesto a pagar. Yo defiendo la libertad de ponerme lo que quiera en mi cuerpo”, comentó el serbio.
El actual número uno del mundo, viene de ser deportado de Australia por lo que no pudo participar en el primer gran torneo del año, ni mucho menos tuvo la oportunidad de defender su título en Grand Slam del suelo australiano.
“Me decepcionó mucho la manera cómo terminaron allí las cosas. No fue nada fácil afrontar esa situación. el ministro de Inmigración Alex Hawke usó su poder para cancelar mi visado porque, bajo su criterio, que iba a crear un sentimiento contrario a las vacunas en el país o en la ciudad de Melbourne. Y yo no estoy de acuerdo con eso en absoluto”, añadió Novak Djokovic.
Pero el Abierto de Australia no será su única ausencia, sino que hoy por hoy, no podría disputar ni el Roland Garros, ni mucho menos el Wimbledon; ambos correspondientes a los otros dos torneos Grand Slam. Asimismo, tampoco se le permitirá el ingreso a los Estados Unidos para jugar el Masters 1,000 de Indian Wells y Miami.
“Espero poder jugar algunos años más, pero yo intento estar en armonía con mi cuerpo. Sin embargo, tengo la mente abierta porque debemos encontrar una solución para acabar con el COVID”, finalizó el serbio.
