La mató, porque se enamoró locamente de otra mujer y su esposa era un tropiezo en su camino. Solo irá preso 15 años.
Thomas Gotthard, sacerdote luterano que confesó haber matado a su esposa y disuelto su cuerpo en ácido imitando a la serie de TV “Breaking Bad”, fue sentenciado a 15 años de prisión en Dinamarca.
Gotthard, de 44 años, admitió durante una audiencia a puerta cerrada el martes que mató a su esposa, Maria From Jakobsen (43) en medio de una disputa matrimonial y una relación que comenzó con otra mujer de la que estaba “locamente enamorado”, informó el portal danés The Local.
“Yo maté a María”, dijo Gotthard al final de su juicio. “Terminé con su vida; ella no merecía ese destino. Soy culpable de haber mentido y engañado a todos. He sido un matón total. Envié mi vida a la oscuridad donde quiero quedarme. Nadie debería sentir lástima por mí”.
Gotthard, quien mantuvo su inocencia hasta el mes pasado, dijo que divorciarse de Jakobsen habría causado “problemas” a ella y a los dos hijos de la pareja. Después de golpearla en la parte posterior de la cabeza con una piedra, el sacerdote decidió deshacerse del cuerpo en ácido en un barril de alimentación de 54 galones, imitando un episodio de “Breaking Bad”, según el informe.
Gotthard dijo que mantuvo el cuerpo de su esposa en un cobertizo cerrado dentro del barril durante una noche antes de trasladarlo a una finca abandonada. Luego roció el cadáver en casi 12 galones de ácido clorhídrico y 13 libras de sosa cáustica para disolverlo, pero el barril terminó siendo demasiado pesado para moverlo, según él mismo detalló.
Por ello dividió los restos de Jakobsen en dos barriles de menor tamaño, que enterró y luego desenterró para cortar las partes restantes en pedazos más pequeños. Luego quemó y enterró los huesos restantes.
“Ésta no es una historia de amor infeliz sobre un hombre que no pudo conseguir el amor de su vida”, dijo la fiscal Anne-Mette Seerup. “Al contrario, éste es un hombre que vio a su esposa como un bloque y una cadena alrededor de su pierna”.
Jakobsen fue vista por última vez a finales de octubre de 2020 y su hermana denunció su desaparición al día siguiente. Gotthard dijo a los investigadores en ese momento que ella había dejado su casa en Frederikssund porque estaba deprimida, abandonando además su teléfono, tarjetas de crédito y computadora.
Tres semanas después, Gotthard fue arrestado y suspendido de su cargo de párroco. En abril fue acusado de asesinato después de que los investigadores encontraron ácido clorhídrico y sosa cáustica en la casa de la pareja, así como búsquedas en Internet en su computadora de términos como “profundidad del mar”, “barriles de petróleo”, “suicidio” y “limpieza”.
Los fiscales habían solicitado la pena máxima de 15 años a la que se enfrentaba Gotthard. “Lo único que lamenta es que lo atraparon”, dijo la fiscal Seerup sobre el acusado. Y agregó que Gotthard llevó a las autoridades al cuerpo de Jakobsen sólo porque ya estaban buscando cerca. “La policía estaba pisándole los talones”.