jueves, noviembre 7, 2024
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OMS: “La pandemia del coronavirus está lejos de llegar a su final”

La semana pasada el organismo registró 4.8 millones de nuevos casos de covid-19 en el mundo.

Los casos semanales de covid-19 en el mundo bajaron en los últimos siete días con respecto a la semana anterior, una tendencia que se inició ya a principios de mayo, aunque la pandemia está lejos de su final, aseguró el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Hay una enorme desconexión entre países con altas tasas de vacunación, en los que la mentalidad ya es de que la pandemia ha terminado, y otros que experimentan enormes olas de infección, advirtió el máximo responsable de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en rueda de prensa.

La semana pasada la OMS registró 4.8 millones de nuevos casos de covid-19 en el mundo, frente a los 5.4 millones de la anterior y los 5.7 de finales de abril, que batió el récord de contagios semanales durante la pandemia.

La situación en algunos países sigue siendo muy preocupante, la pandemia está lejos de su final y no lo hará en ninguna parte hasta que no acabe en todo el mundo, recalcó el experto etíope.

Incluso países que antes han tenido éxito en contener los casos están viendo ahora un dramático aumento de éstos, así como de las hospitalizaciones y muertes, añadió Ghebreyesus, en aparente alusión a los aumentos de contagios que se están registrando en algunos lugares de Asia Oriental.

Tedros afirmó que la lucha contra la pandemia aún tiene que superar obstáculos como la aparición de nuevas variantes del coronavirus, la falta de suministro de oxígeno en algunos países o en ocasiones la excesivamente rápida relajación de las medidas de prevención de contagios.

«Incluso en países donde los casos han bajado es clave continuar la secuenciación genómica (de posibles variantes del coronavirus) para evitar que las medidas de prevención no se levanten prematuramente», insistió el director general.

Consuelo Porras: “La construcción de una mejor nación es tarea de todos y todas”

Presidentes de los organismos de Estado se apersonaron este lunes 17 de mayo a la presentación del tercer informe anual de la administración de María Consuelo Porras Argueta como fiscal general del Ministerio Público.

“En mi calidad de Fiscal General, ratifico mi compromiso de seguir sirviendo a mi país con todo el ahínco y determinación”

Entre los logros que resaltó Porras esta la apertura de agencias fiscales en los 340 municipios, mediante la cual se contrataron a unas 2,300 personas.  

“El presente año de gestión ha estado enmarcado en la lamentable situación sanitaria del covid-19, la cual ha afectado grandemente a Guatemala y al mundo entero, lo cual nos demuestra la fragilidad de la vida humana y nos exhorta a aprovechar cada día al máximo. Ante tal realidad, el Estado y sus instituciones deben desempeñar un rol determinante en garantizar el goce de los derechos fundamentales de la población, mediante la prestación de servicios de calidad, de los cuales, el acceso a la justicia se constituye en un servicio esencial”, manifestó.

Sobre los principales desafíos que afronta el Ministerio Público para poder agilizar los procesos de investigación

“Se han creado todas las herramientas para que el MP pueda dar los mejores resultados. En unos cuantos días estaremos presentando a Guatemala como la primera institución inteligente del país. Los fiscales contarán con herramientas para poder resolver sus investigaciones”, aseguró Porras.

La Fiscal General aclaró que no ha recibido ningún proyecto de antejuicio contra los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) que integraron la postuladora señalada por amaño en la nominación de Cortes.

Sobre su informe explicó que era un informe general y no para detallar casos o procesos. Invitó a los periodistas a acercarse a las fiscalías directamente para ver como van los procesos.

Invitó a la población a colocar sus denuncias y a confiar en el MP.

EE.UU. sigue sin pedir un alto el fuego entre israelíes y palestinos

La Casa Blanca siguió este lunes sin pedir públicamente un alto el fuego para frenar la escalada bélica entre Israel y los palestinos, pese a que en los últimos días ha crecido la presión en EEUU y el mundo para que el Gobierno presione con el fin de que haya un cese de las hostilidades.

Ni el presidente de EEUU, Joe Biden, ni el secretario de Estado, Antony Blinken, han pedido públicamente un alto al fuego entre las partes.

Preguntada por ello, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, rechazó ofrecer una explicación y aseguró que “todas las declaraciones que se hacen buscan reducir la violencia y poner fin al conflicto sobre el terreno”.

“En la diplomacia -añadió- hay veces en las que necesitaremos que esas conversaciones sean discretas, no vamos a informar sobre todo desde aquí. Pero ese es nuestro objetivo y el prisma a través del cual tomamos cada decisión”.

La portavoz insistió en que Washington usará una “diplomacia discreta e intensa entre bastidores” para frenar la escalada bélica, que ya se ha cobrado las vidas de 10 israelíes y 200 palestinos, entre ellos 42 civiles que murieron el domingo en el ataque israelí más letal hasta ahora.

Los comentarios de Psaki se producen en un momento en que el Partido Demócrata está presionando a Biden para que juegue un papel más activo en la crisis y pida un alto el fuego.

En concreto, 28 senadores progresistas, liderados por uno de los representantes de Georgia, Jon Ossoff, publicaron el domingo por la noche un comunicado en el que pidieron un alto al fuego “inmediato” para evitar una mayor escalada de la violencia y la pérdida de más vidas.

Además, el senador progresista Bernie Sanders ha urgido a Biden a reconsiderar los 4.000 millones de dólares en ayuda militar que cada año EEUU otorga a Israel, porque considera que esa asistencia no debe usarse para “violar derechos humanos”, como a su juicio está ocurriendo en Gaza.

Entretanto, la congresista Alexandria Ocasio-Cortez, una de las estrellas emergentes del Partido Demócrata, acusó el sábado a Israel de haber instaurado el “apartheid”.

Por su parte, en declaraciones a la prensa, Biden dijo que tiene previsto conversar este lunes con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

El dirigente israelí se comprometió en las últimas horas a compartir con EEUU toda información disponible sobre el bombardeo de este sábado contra el edificio en Gaza donde tenían sus oficinas la agencia de noticias estadounidense AP y la cadena de televisión catarí Al Jazeera.

La razón del ataque, según Israel, fue que el grupo islamista palestino Hamás (que gobierna de facto Gaza desde 2007) empleaba el inmueble como oficina de inteligencia y para el desarrollo de armamento, algo que ha puesto en duda AP.

Preguntada sobre ello, Psaki rechazó detallar si Biden ha tenido acceso a informes de inteligencia israelíes que respalden la alegación israelí de que Hamas operaba en el edificio.