Un juez federal de Texas bloqueó temporalmente este lunes un programa impulsado por el Gobierno de Joe Biden que beneficia a cónyuges e hijastros indocumentados de ciudadanos estadounidenses, luego de que 16 estados liderados por republicanos presentaron una demanda contra la medida.
El juez federal de distrito J. Campbell Barker detuvo la implementación de la iniciativa denominada Keeping Families Together (Manteniendo a las familias unidas), que nació de una acción ejecutiva de Biden y entró en vigor el 19 de agosto.
En la práctica, la medida permite que ciertos cónyuges e hijastros indocumentados de ciudadanos estadounidenses soliciten el permiso de permanencia temporal y luego pueden pedir la residencia permanente sin salir de EE.UU., como ocurre regularmente.
Según estimaciones del Gobierno, la medida proporcionará estatus legal y protección a unas 500.000 familias estadounidenses y a unos 50.000 hijos de inmigrantes que son menores de 21 años que no tengan ciudadanía y cuyo progenitor esté casado con un ciudadano estadounidense.
La falta de grúas operativas en el Puerto Quetzal está generando demoras significativas en las operaciones de carga y descarga de buques.
De las cuatro grúas disponibles en el puerto, solo una o, en ocasiones, dos están funcionando, lo que ha llevado a prolongados tiempos de espera para las empresas usuarias.
A pesar de que en 2023 la Empresa Portuaria Quetzal (EPQ) firmó un contrato para incorporar una quinta grúa, la situación no ha mejorado sustancialmente.
El contrato actual con la empresa Yilport, que ha sido objeto de críticas, parece ser un obstáculo para la adquisición de nuevas grúas. Las demoras en el fondeo y las operaciones de carga y descarga han generado una creciente preocupación entre las empresas que utilizan el puerto.
Javier Reyes, miembro del sindicato de Trabajadores de EPQ, destaca que la insuficiencia de grúas operativas no es un problema nuevo.
«Las deficiencias han sido evidentes durante varios años, y este es el motivo por el cual hemos visto cambios en las empresas proveedoras de grúas,» señala Reyes.
Explica que la diferencia en el tiempo de descarga es notable: un buque que podría ser descargado en 20 horas con cuatro grúas puede tardar mucho más con solo una.
Reyes también menciona que se ha solicitado una evaluación del contrato actual con la empresa proveedora de grúas, y que EPQ ha emitido una carta de invitación para contratar un nuevo servicio. Sin embargo, Reyes advierte que este proceso podría ser largo, ya que las grúas no están disponibles de inmediato.
Reyes sugiere que la EPQ debería considerar la adquisición de sus propias grúas para evitar depender de proveedores externos.
No obstante, también reconoce que los repuestos para grúas no están disponibles en el país, lo que complicaría el mantenimiento y podría implicar trámites burocráticos prolongados bajo la Ley de Contrataciones del Estado.
