Entre las 19 víctimas estaba Paola Dámaris Sacarías, de 22 años, originaria de Comitancillo, San Marcos. La primera en ser identificada. La Fiscalía de Tamaulipas informó este martes que 12 policías estatales fueron detenidos por su posible vínculo con la masacre de 19 personas, entre ellas, migrantes guatemaltecos. El pasado 22 de enero se encontraron en Camargo Tamaulipas dos vehículos con 19 cuerpos de migrantes totalmente calcinados.
Las primeras versiones sugerían que habrían muerto durante un enfrentamiento armado de carteles y organizaciones criminales que diputaban territorio. Pero esta noche, la fiscalía general de Tamaulipas, informó que detuvo a 12 policías estatales. Se les acusa de homicidio calificado, abuso de autoridad y falsedad en informes dados a una autoridad. “En los hechos registrados el 22 de enero participaron al menos 12 elementos de la policía estatal.
Cobra fuerza la teoría de la alteración de la escena del crimen, debido a la ausencia de casquillos y municiones en concordancia con los disparos que presentaban la unidad tipo picop, así como el informe policial que rindieron los agentes que tuvieron conocimiento del crimen”, detalló Algunos de ellos son policías estatales y otros del grupo Especial de Seguridad Pública, conocido como “los Gopes”.
Este grupo ya tiene antecedentes de operar de una forma similar. El 5 de septiembre del 2019, integrantes de este grupo, asesinaron a 8 personas en Nuevo Laredo y alteraron la escena del crimen para hacerlo pasar como un enfrentamiento. Por la masacre de migrantes, que se cree eran de origen guatemalteco, la fiscalía lleva dos líneas de investigación.
Una relacionada por la disputa entre criminales por el trafico de migrantes. La otra, que todo se trató de una confusión, ya que el día del crimen, participaron más vehículos transportando indocumentados, en uno de los cuales había sujetos armados que daban protección al grupo. Hasta el momento, solo una víctima ha sido identificada.
Se trata de Paola Dámaris Sacarías, de 22 años. Su padre, pidió ayuda, para que las autoridades lo apoyen en la repatriación del cuerpo de su hija, desde el Aeropuerto Internacional La Aurora, hasta Comitancillo, San Marcos, de donde era originaria. La familia busca darle el último adiós a la joven que solo buscaba una mejor calidad de vida. Las autoridades mexicanas y guatemaltecas trabajan para identificar a los demás cuerpos.
